Zrcadlení melancholie - Trist
Zrcadlení melancholie - Trist
Trist, de República Checa, es una banda muy importante dentro del Depressive Suicidal Black Metal. Formada por Trist, Jan Šincl, en 2003, se separó en 2011 y además tuvo una pausa entre 2007 y 2009. A lo largo de su historia sacó bastantes demos, EPs y splits y sacó un disco en 2006 y tres en 2007. En general Jan se ocupó de todo en los discos excepto en el homenajeado y Stíny, el LP debut, donde Pestkrist (o “P”) se hizo cargo de la batería. Zrcadlení melancholie, algo así como Reflejando la melancolía (traductor de google), es el último disco.
No estoy muy inmerso en este subgénero así que no tengo mucho con qué comparar pero me quedo con lo que me generó cuando lo escuché y no fueron precisamente ganas de matarme, por más que un poco del objetivo de este estilo es transmitir algo bien depresivo y melancólico. Para lo enormemente repetitivo que es, tiene algo que te mantiene entretenido, aunque sea es lo que me pasó a mí. Te sumerge en un trance hipnótico y atmosférico que se enmaraña con variaciones casi imperceptibles y contrasta cada tanto e impredeciblemente con gritos desgarradores.
Exceptuando los gritos, el disco es totalmente instrumental, algo que en general no está en mis preferencias pero en este caso logró algo distinto, tiene un impacto que pudo marcar esa diferencia. Manteniendo la batería un ritmo constante, los riffs van variando un poquito y se van reciclando y volviendo en distintas formas. Hay pasajes de sonido más nítido y predominantemente melódicos como otros donde se forma una pared de sonoridad densa.
Para mencionar algunos temas “Poslední cesta” y “Trnový labyrint”, vale la pena prestarles atención... ya que conforman la totalidad del disco, 22 min 59 y 14 min 29 respectivamente. Completando un disco de casi cuarenta minutos de melancolía, depresión y trance letárgico.
Un detalle que puede sumar es escucharlo con auriculares, aunque sea yo le pegue la primera escuchada así; el primer grito sentí que venía de atrás mío y me dió un escalofrío y revolvió el estómago, hermoso momento.
Por último la tapa, la imagen habla por sí sola no hay mucho que agregar pero lo que sí en cuanto al logo diría que no me cierra del todo.